Del paro armado de los “Urabeños” quedó el pánico. No solo fueron los seis policías muertos en el país, el bus alimentador del Metro quemado y el tiroteo en Belén Rincón lo que generó miedo en la ciudadanía. Unas cadenas de mensajes falsos transmitidos por las redes sociales, principalmente por Whatsapp, alertaron a los ciudadanos sobre supuestos actos delictivos que se iban a presentar durante el fin de semana pasado en Antioquia, Atlántico y Córdoba.
En varias regiones de Antioquia impusieron una especie de “toque de queda” a través de mensajes en redes sociales. El gobernador del departamento, Luis Pérez, anunció una investigación: “se van a tomar todos los correos electrónicos, todos los mensajes de Whatsapp que se enviaron antes y durante el paro, y se va a investigar de dónde salieron. Ustedes saben que en la red queda la huella de donde salieron”.
Hasta el momento, la Policía Nacional solo ha emitido comunicados señalando que las cadenas de mensajes que circularon son falsos. El alcalde de Medellín, Federico Gutiérrez, trató de eclipsar las cadenas con un mensaje suyo grabado con celular: “anda circulando un audio que definitivamente es falso y yo creo que aquí hay gente que quiere generar miedo, que quiere generar pánico, y eso no lo vamos a permitir”.
¿Cómo evitar el pánico?
Este tipo de cadenas, según la Policía Nacional, son consideradas un delito informático por que se enmarcan en la “divulgación indebida de contenidos”, que contiene “el envío de correos electrónicos anónimos, con fines injuriosos o calumnias, amenazas y extorsiones”. Las personas que enviaron estas cadenas podrían pagar ocho años de prisión.
El coronel Saulo López, experto en delitos informáticos de la Policía Metropolitana de Bogotá, le dijo a EL COLOMBIANO que las personas deben ignorar estos mensajes o llamar a la Policía para confirmar si es auténtico. “No es habitual que las bandas criminales o delincuenciales amenacen a través de cadenas de Whatsapp. No es usual que intimiden por medios electrónicos, sino que tomen acciones concretas. Lo que ha hecho por ahora la Policía es correcto, emitir un mensaje igualmente masivo señalando que la cadena era falsa”.
De acuerdo con Luis García, abogado e investigador en temas penales, los mensajes intimidatorios de organizaciones terroristas como el Estado Islámico tienen “una elaboración muy seria y estructurada. Los mensajes que llegaron en Colombia durante el paro armado no están estructurados, la voz no tiene el tono amenazante y en general no es serio. La Policía debe identificar a las personas que los enviaron y judicializarlas. Ahora, creo que el pánico se generó más por la balacera y la quema del bus que por las cadenas”.
Para que la ciudadanía no caiga en este tipo de “trampas”, el senador Jaime Amín, experto en temas cibernéticos, dice que “la Policía tiene que crear un mecanismo de prevención para los delitos cibernéticos y una comisión para judicializar a los responsables. EL CTI en asocio con la Sijín tienen que ser mucho más eficientes en la identificación de delitos cibernéticos”.
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